La deformación térmica en la producción de tubos de acero de soldadura por arco sumergido longitudinal (LSAW) puede afectar significativamente a la calidad del producto. La gestión adecuada de la deformación térmica implica varios pasos críticos, desde la selección del material hasta el tratamiento térmico preciso y las técnicas operativas.
1. Selección razonable del material
Elegir los materiales adecuados es esencial. Para moldes de precisión propensos a la deformación térmica, seleccione acero con características mínimas de microdeformación. Para moldes con segregación severa de carburos, emplee métodos adecuados de fundición y tratamiento térmico, como el temple y revenido o el tratamiento térmico en solución. Evite utilizar acero para moldes de fundición y doble refinado de gran tamaño, que es inadecuado para dichos tratamientos. Controle cuidadosamente la temperatura y la tasa de calentamiento, especialmente para moldes de precisión complejos, utilizando calentamiento lento, precalentamiento y otras técnicas para asegurar una distribución uniforme del calor y minimizar la deformación.
2. Procedimientos correctos de tratamiento térmico
La aplicación de procesos de tratamiento térmico precisos es crucial para reducir la deformación en los moldes de precisión. Aunque la deformación en moldes de precisión complejos puede ser un reto, comprender los patrones de deformación y analizar las causas puede ayudar a elegir métodos para minimizar y controlar la deformación anormal.
3. Tratamiento de precalentamiento y eliminación de tensiones
Realice un tratamiento de precalentamiento en los moldes de precisión para eliminar las tensiones residuales del proceso de mecanizado. Cuando sea factible, utilice el calentamiento criogénico al vacío y el endurecimiento después del temple. Garantice la dureza del molde empleando procesos de preenfriamiento, enfriamiento graduado o enfriamiento a temperatura de enfriamiento para gestionar eficazmente la deformación térmica.
4. Diseño racional de moldes
Diseñe moldes con formas simétricas y evite disparidades de grosor significativas. Para moldes grandes y complejos, planifique la deformación dejando márgenes y considerando diseños combinados. Utilice tratamientos térmicos previos, de envejecimiento, de temple y de nitruración para mantener la precisión de los moldes. Al reparar moldes por defectos como ampollas, porosidad o desgaste, utilice la soldadura en frío y otras técnicas de reparación de zonas poco afectadas por el calor para evitar nuevas deformaciones.
Mediante la gestión cuidadosa de estos aspectos, la producción de tubos de acero LSAW puede lograr una mayor calidad y consistencia, reduciendo el impacto de la deformación térmica en el producto final.